martes, 23 de octubre de 2007

Una triste noticia



Hoy me enteré de que el periodista Juan Antonio Cebrián murió el Domingo, a los 41 años.

He sentido mucho su muerte. Admiraba mucho su conocimiento, su manera de divulgarlo y comunicarlo, su curiosidad y su talante abierto pero riguroso.

Disfrutaba mucho de aquellas noches en la cama escuchando "La Rosa de los Vientos", hasta el final, sin la tensión del saber que tenía que dormir porque había que levantarme temprano, porque durante aquella época, no tenía ni que estudiar, ni que trabajar. Vamos, que no tenía nada mejor que hacer por las noches que aprender cosas sobre historia, ciencia, enigmas y fenómenos extraños de la voz de Juan Antonio y sus geniales colaboradores. Recuerdo especialmente los pasajes de la historia, que relataba magistralmente, con efectos de sonido y ambientación que, en la intimidad y oscuridad del dormitorio, hacían que pudieras casi ver a aquellos caballeros templarios, o casi estar en Normandía durante el desembarco...Y después, empezaba el "Esta noche o nunca", con el gran "Monaguillo"...¡Ah! Qué noches tan agradables aquellas. Tiene algo especial la radio, ¿verdad?

Un sentido recuerdo para él, pues, que seguro que anda agitado buscando la forma de, ahora que lo sabe, contarnos si hay y cómo es o no el más allá...

1 comentario:

Anónimo dijo...

hoy también mi fotolog habla de la radio, y fue antes de leer el tuyo eh? pues vaya!! por qué la gente se muere tan joven tio? es que es una mierda, bueno es una mierda que la gente se muera, pero más siendo joven y teniendo mucho por delante o no?
pues lo siento de veras